Durante el debate que sostuvo el Dr. Dante Urbina con el teólogo Nestor Díaz, el sr. Nestor objetó en el minuto 1:03:20 que la referencia cruzada que Dante encontraba en Hebreos 11:35 con 2 Macabeos donde se habla de los mártires Macabeos, no era en realidad una alusión a este deuterocanónico. De hecho, Nestor dice que este es un argumento «totalmente risible; un disparo al pie» (1:03:27). Para él, el texto se refiere a los muertos de la viuda de Saret y la esposa de Zunem mencionadas en el libro de los Reyes, dado que el versículo anterior habla de las mujeres que recibieron a sus muertos en la resurrección. Para Nestor, el pensamiento del autor al respecto aquí es inmediato. También comenta que otro problema con utilizar este texto es que el pasaje habla de que tales mártires «anduvieron de aquí para allá cubiertos con pieles de ovejas y de cabra» (LBLA). A partir de esta evidencia, Nestor dice que lo más probable es que el texto se refiera «a los mártires cristianos que fueron perseguidos por Nerón, y que de acuerdo con los Anales de Tácito 15:44 fueron vestidos con pieles de animales y arrojados para que los destrozaran los perros» (1:04:30).
En primer lugar, incluso si Hebreos 11:37 se refiere a los cristianos perseguidos por Nerón, eso no invalida que en el versículo 35 se esté hablando de los mártires macabeos igualmente. ¡No hay ninguna contrariedad ahí! De hecho, si ustedes van a los minutos que he mencionado con anterioridad, Néstor presta más atención al versículo 37 que al versículo 35, el cual cita Dante en su discurso de apertura. También se confunde cuando dice que el paralelismo de Hebreos 11:37 con 2 Macabeos es un argumento reiterado por Michuta, cuando Michuta en realidad parte de Hebreos 11:35 y es a partir de ahí que desarrolla su argumentación. Esto da a entender que Nestor no estaba prestando atención a la disertación de Dante y tampoco al libro de Gary.
En segundo lugar, si miramos el texto más de cerca, vemos que en el versículo 35, el autor de los Hebreos da tres tipos de identificación para los mártires aquí mencionados: 1) fueron torturados, 2) se rehusaron a la liberación y 3) con ello pretendían obtener una mejor resurrección. Como bien ha señalado Gary Michuta1, en el Antiguo Testamento sólo encontramos a algunos judíos que cumplen con estos tres rasgos. En 2 Macabeos 6:22-23 se dice:
Al obrar así, se libraría de la muerte y conseguiría ser tratado con clemencia en virtud de la antigua amistad que tenía con ellos. Pero él tomó una honrosa decisión digna de su edad, del prestigio de su vejez, de sus merecidas y venerables canas, de su inmejorable conducta desde niño, y, sobre todo, de la divina y santa legislación. Así que dio una respuesta consecuente contestando de inmediato que lo enviasen al Hades.
Aquí se cumple el criterio (2) de identificación de Hebreos 11:35, y más adelante en el mismo capítulo de Macabeos, en el versículo 30, se cumple el criterio (1):
Cuando estaba a punto de morir por las heridas, dijo entre gemidos: «quede patente al Señor, poseedor del santo conocimiento, que aun pudiendo librarme de la muerte, soporto fuertes dolores en mi cuerpo al ser flagelado, pero en mi alma lo sufro con gusto por temor a Él.
Algunos ejemplos que cumplen con el tercer criterio de Hebreos 11:35 se encuentran en 2 Macabeos 7:9, 14, respectivamente:
Estando en el último suspiro dijo: Tú, malvado, nos borras de la vida presente, pero el rey del mundo nos resucitará a una vida nueva y eterna a quienes hemos muerto por sus leyes.
Y cuando estaba en las últimas habló de este modo: Es preferible morir a manos de los hombres con la esperanza que Dios da de ser resucitados de nuevo por Él; para ti, en cambio, no habrá resurrección a la vida.
Estos testimonios son demasiado explícitos y correspondientes con Hebreos 11:35, muchísimo más que cualquier otro relato veterotestamentario de los libros protocanónicos, incluyendo a los muertos de Saret y Zunem que no cumplen con los tres criterios, especialmente con el segundo, puesto que tales muertos no fueron torturados. A eso le podemos sumar el hecho ya mencionado de los paralelismos lingüísticos encontrados, como el uso de la palabra griega tumpanízo para «torturar» en Hebreos 11:35 y 2 Macabeos 6:19, 28. Esto es especialmente curioso, ya que tumpanízo generalmente se utilizaba en la septuaginta para referirse al toque del tambor o algún otro instrumento musical (p. Ej. ver 1 Samuel 21:13). Mientras que las únicas dos veces en las que se refiere a la tortura física es en los textos ya citados de Macabeos y en los Hebreos.
También si observamos el versículo 36 de Hebreos 11, encontramos la palabra griega empaigmós que se traduce como «vituperios» (LBLA), «insultos» (NBL) o «burlas» (KJV). Este mismo término es utilizado en 2 Macabeos 7:7 cuando se habla del «suplicio» (empaigmós) de los Macabeos. Todo esto en conjunto aumenta la plausibilidad de que Hebreos 11:35-36 tenga más en mente a los mártires macabeos que a otra cosa. En el caso de los muertos de Saret y Sunem si bien gozan con cierto poder explicativo, cuando miramos los textos más de cerca no cumplen con todos los criterios mencionados.
Ahora bien, incluso podemos ceder parcialmente por caridad a lo que dice Nestor respecto a que el verso 37 tiene una relación con los mártires cristianos por el imperio romano, pero su objeción sigue fracasando porque no son necesariamente mutuamente excluyentes las inclusiones de varios grupos judíos/cristianos que hayan sido víctimas del martirio. Si extendemos la argumentación hasta este pasaje, incluso podríamos añadir a otros mártires como Isaías, Jeremías o los mismos apóstoles2. Pero la cuestión del debate se centra específicamente en Hebreos 11:35, donde el mejor candidato, para al menos 50 comentaristas bíblicos como ha señalado Gary Michuta, se refiere a los mártires macabeos. Por ejemplo, uno de los expositores bíblicos más destacados del siglo XX, el pastor protestante Ray C. Stedman, comenta sobre Hebreos 11:35-38:
Los versículos 35-38 recogen la otra cara de la moneda. Los incidentes que aquí se describen parecen sacados principalmente de los días de la revuelta macabea y de las crueldades del rey sirio Antíoco Epífanes a principios del siglo II a.C.3
También el exégeta y expositor bíblico: Ernesto Trenchard, encuentra en los versículos 37 al 38 una referencia clara a los mártires macabeos, ni siquiera lo que Nestor propone sobre el verso 37. Trenchard dice que los martirizados por el rey Antíoco sirvieron como ejemplo para que más judíos desafieran la autoridad de éste:
Los detalles de 11:37, 38 no serán tan conocidos, pues corresponden especialmente al período heroico de los Macabeos, cuando, estimulados por el ejemplo de esta familia, tantos judíos desafiaron al rey de Siria Antíoco Epífanes, antes de abandonar la fe de sus padres.4
También F. F. Bruce observa que el verbo usado para «torturados» en Hebreos 11:35, debido a su forma particular (que no es usada en ese sentido en ningún otro lado del A. T. salvo en 2 Macabeos), se refiere al «castigo impuesto a Eleazar, uno de los nobles confesores de la época macabea»5. De hecho, este fue precisamente el fracaso de Nestor durante el debate. En una de sus objeciones, dijo que en ningún lado de Hebreos 11:35 se utilizaba el verbo «torturar»; sin embargo, varias biblias traducen tumpanízo como «torturados», además de que los comentaristas bíblicos suelen encontrar en este verbo una clara alusión a la tortura, como es el caso del exégeta anterior. Incluso el anticatólico James Swan en uno de sus artículo comenta que la cláusula «otros fueron torturados» «es el primer atisbo de una posible alusión apócrifa», y concluye que «parece muy probable que el autor de Hebreos aludió a los apócrifos en el capítulo 11. Los paralelos que sugieren los apologistas católicos romanos particularmente en el versículo 35 y 2 de Macabeos parece probable»6.
Creo que el desempeño de Néstor contra este testigo de Dante fue pésimo. En primer lugar, confundió los textos bíblicos mencionados por Dante y Michuta que a lo mucho se extendían del verso 35 al 36 de Hebreos 11. En segundo lugar, parece que aunque leyó el trabajo de Michuta, ignoró completamente sus argumentos y simplemente se atrevió a tacharlos de risibles sin ninguna pena y con toda seguridad, aunque su demostración fue poca. Y por último, no parece haber interactuado más con las contrareplicas de Dante, por lo que sugiero que fue una prueba de que el debate sobre este texto estaba cerrado en su contra.
Referencias.
- Michuta, G. (2017). The Case for Deuterocanon: Evidence and Arguments. 2da Ed. Michigan: Nikaria Press. ch. 1.
- Millos, S. (2009). Comentario Exegético al Texto Griego del Nuevo Testamento: Hebreos. España: CLIE. p. 695.
- https://www.raystedman.org/hebrews2/heb2comm2.html
- Trenchard, E. (2013). Comentario Expositivo del Nuevo Testamento. España: Editorial CLIE. p. 3919. [Edición kindle]
- Bruce, F. (1964). The New International Commentary on the New Testament: The Epistle to the Hebrews. Michigan: EERDMANS PUBLISHING GO. p. 339.
- https://www.aomin.org/aoblog/technology/is-hebrews-1135-37-a-proof-for-the-inclusion-of-the-apocrypha-to-the-canon/